Según un nuevo informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS), los avances de las bacterias resistentes a los antibióticos están superando al desarrollo médico. En él se alerta de que entre 2018 y 2023 la resistencia a los antibióticos aumentó más de un 40 % en combinaciones patógeno-fármaco monitorizadas, con un crecimiento anual medio del 5–15 %.
Uno de cada seis casos analizados en laboratorio en 2023 mostró resistencia, afectando a infecciones comunes como las urinarias, intestinales, de sangre o gonorrea. Bacterias como E. coli y Klebsiella pneumoniae, responsables de infecciones graves, ya presentan tasas de resistencia superiores al 40 % y 55 % respectivamente frente a antibióticos de primera línea.
El informe también revela que el acceso a datos fiables es limitado: casi la mitad de los países participantes no reportaron información en 2023 o carecen de infraestructura adecuada. La OMS subraya la urgencia de fortalecer los sistemas de vigilancia y apostar por innovaciones como nuevos antibióticos o pruebas diagnósticas rápidas. Sin acción efectiva, las muertes anuales por infecciones resistentes podrían superar los 10 millones en 2050.




